martes, 18 de septiembre de 2012

] Hipólito como presidente del PRD



Juan Taveras Hernández
Hipólito Mejía debe ser el candidato a la presidencia del Partido Revolucionario Dominicano. Ningún otro las condiciones para consolidarlo y convertirlo en una fuerza capaz de aglutinar a todos los sectores  dispuestos a luchar por un cambio de modelo económico, político y social.
El ex presidente de la República le ganaría, mucho a poco, al presidente de facto del PRD, Miguel Vargas, evitando que la división sea mayor de lo que será si quién lo enfrenta es otro.
Con Hipólito de presidente, el PRD se convertiría en una fuerza opositora formidable que nadie, ni siquiera los sectores más conservadores, incluyendo el gobierno, podrían ignorar.
Con un presidente como Hipólito, el PRD garantizaría su retorno al poder en las elecciones del 2016 ganando, no solo la presidencia de la República, sino una gran cantidad de legisladores, alcaldes y regidores en todo el país.
Si Hipólito decidiera anunciar su candidatura,  dirigentes de todos los niveles en las provincias y municipios, lo apoyarían de manera entusiasta.  Los más de dos millones de personas que votaron a su favor en las elecciones pasadas también lo respaldarían.
Tal vez Hipólito no sea la única opción para enfrentar al presidente de facto del PRD, pero es la mejor, la que menos traumas produciría.
La convención del PRD para elegir las nuevas autoridades debe celebrarse estatutariamente  en el primer semestre del  año próximo. Pero el presidente de facto de ese partido dice que la montará –dependiendo si le conviene- en el año 2014. De acuerdo con algunas mediciones el presidente ilegítimo del PRD apenas tiene un 18% de aceptación. Para repuntar  requiere del apoyo de sus aliados del gobierno, de mucho dinero y mucho tiempo. Sabe muy bien que la correlación de fuerza le es adversa, que si va a una convención el año próximo sufrirá una aplastante derrota. Mayor si enfrenta a Hipólito, a quien teme como el diablo a la cruz.
El señor Vargas Maldonado para lograr apoyo legal y recursos del gobierno, le da un espaldarazo al presidente de la JCE, otro a Danilo Medina ,y para no quedarse corto, se entrega en los brazos del Cardenal,  enemigos todos del PRD.
Como en otras ocasiones, Miguel está ofreciendo senadurías, diputaciones, sindicaturas y regidurías, sin convención, ignorando que la propuesta de ley de partidos que él mismo promueve, solo otorgaría un 15% de reservas a los partidos. Como la otra vez,  Vargas quiere repartir los cargos en un 70 u 80% entre sus súbditos o vasallos. (Sigue creyendo que compró al PRD en el mercado de las pulgas y de las putas, que no es lo mismo, pero es igual)
Hipólito se declaró líder de la oposición. Para ser líder y ejercer ese liderazgo, es necesario, hoy más que nunca, contar con un partido fuerte, disciplinado y organizado, sin traidores  ni caballos de Troya minando sus bases para que no logren la victoria en las luchas por venir.
Dejémonos de pendejadas y de masturbaciones mentales, Hipólito debe ser el presidente del PRD.  Cualquier otra vaina es un invento peligroso para el futuro tanto del partido como del país. No pongamos la carreta delante de los bueyes. ¡Hipólito presidente del PRD!

No hay comentarios: